
GM reduce turnos en planta de Canadá debido a "ambiente comercial"

General Motors anunció el viernes que reducirá el número de turnos en una planta de ensamblaje de camiones en Canadá, en momentos en que la guerra comercial del presidente estadounidense, Donald Trump, está afectando gravemente al sector automotor norteamericano.
El anuncio se produce un día después de que el gigante estadounidense anunciara que proyectaba un impacto de entre 4.000 y 5.000 millones de dólares este año debido a los aranceles de Trump, a pesar de las medidas tomadas por el presidente a principios de semana para amortiguar el alcance de la medida.
La planta de GM en Oshawa, Ontario, "volverá a operar en dos turnos" en lugar de tres, "debido a la demanda prevista y la evolución del entorno comercial", declaró la compañía en un comunicado.
"Estos cambios contribuirán a mantener una huella de fabricación sostenible a medida que GM reorienta la planta de Oshawa para fabricar más camiones en Canadá para clientes canadienses", añadió.
Se espera que esto resulte en la eliminación de 700 de los 3.000 empleos en la planta, según el sindicato de trabajadores del sector automotor.
"Las noticias de hoy de GM son extremadamente duras para los trabajadores de Oshawa y sus familias", escribió en X el primer ministro de Ontario, Doug Ford.
"Ante la incertidumbre económica causada por el caos de los aranceles y las amenazas arancelarias del presidente Trump, seguiremos luchando día a día para atraer nuevas inversiones, asegurar empleos bien remunerados y apoyar a los trabajadores y sus familias", añadió.
En marzo, el mandatario estadounidense anunció aranceles del 25% a las importaciones de automóviles, incluidos sus socios en el tratado de libre comercio de América del Norte (T-MEC), México y Canadá, lo que supuso un duro golpe para los fabricantes que han desarrollado líneas de producción altamente integradas en la región.
Posteriormente, su administración otorgó exenciones parciales para México y Canadá en función del valor de los componentes fabricados en Estados Unidos.
Las importaciones estadounidenses de autopartes también deberán pagar aranceles del 25% a partir del sábado, con exenciones para las piezas que cumplan con el T-MEC.
El martes, Trump emitió una orden para reducir los aranceles superpuestos para los fabricantes de automóviles, ya que también impuso gravámenes del 25% a las importaciones de acero y aluminio.
El gobierno también otorgó a la industria un período de gracia de dos años para mover las cadenas de suministro a Estados Unidos.
K.Han--SG